Lo que más destaca del macizo paine son sus imponentes Cuernos del Paine, una fusión de roca sedimentaria con color negro junto a paredes de granito, hacen que esta vista sea una de las más impresionantes del mundo.

Esta es una opción perfecta para disfrutar del área central del parque en una suave y simple caminata. Llegaremos a orillas del Lago Pehoé donde lo bordaremos por pocos kilómetros antes de comenzar nuestra excursión.

El sendero es ideal para apreciar la flora (gran variedad de matorrales), el Paine Grande, montaña que domina el macizo, los siempre peculiares Cuernos, el Valle y Glaciar del Francés y los lagos Nordenskjold y Pehoé, los cuales son separados por una de las cascadas imperdibles del parque, el Salto Grande, postal clásica para todos quienes visitan este remoto rincón de nuestro continente.